Hoy nos ha tocado a nosotros ir a su Colegio, Madre de Dios, para disputar un partido de boccia contra una selección de alumnos de 5º y que ellos, más “su afición”, conozcan este deporte específico de la parálisis cerebral.
Ha sido un partido ajustado en campo visitante pero ha prevalecido nuestra experiencia, vamos, que nos hemos alzado con la victoria y nos hemos traído a casa un bonito trofeo. Era lo de menos; realmente lo importante para sus maestros y para nosotros era jugar juntos, mostrar cómo practicamos deporte y reflejar que está a nuestro alcance al igual que otras tantas cosas.